¿Qué es arrendador?

El arrendador es aquel sujeto o entidad que, siendo propietario o poseedor de un bien, cede temporalmente su uso y disfrute a otra parte, a cambio de una contraprestación económica conocida como renta o alquiler.

En este escenario, asumimos el rol de propietarios que prestan servicios al mercado a través de la cesión de derechos de uso de nuestros activos.

Características principales del arrendador

Como arrendadores, debemos cumplir una serie de responsabilidades legales y fiscales.

Nuestro propósito es mantener el bien en condiciones óptimas para su uso, asegurar la legalidad del contrato de arrendamiento y establecer un precio justo y competitivo de acuerdo con el mercado.

• Obligaciones: Somos responsables de ofrecer un bien que cumpla con las condiciones de habitabilidad o utilización según su naturaleza.
• Derechos: Tenemos el derecho a recibir el pago acordado en el contrato y a que nuestro bien sea devuelto en el mismo estado en que se entregó, salvo el deterioro por el empleo normal.
• Rentabilidad: Buscamos obtener un beneficio económico por la cesión del empleo del bien, el cual debe ser congruente con el valor del mercado.

Tipos de arrendamiento

Dentro del mundo del arrendamiento, diferenciamos varios tipos, dependiendo del bien que se cede y del uso que se le dará.

Como arrendadores, podemos ofrecer inmuebles para vivienda o uso comercial, vehículos, maquinaria para industrias, entre otros.

• Arrendamiento de inmuebles: Ceder la vivienda o locales comerciales.
• Arrendamiento financiero: Cuando además de ceder el uso, se otorga una opción de compra al final del contrato.
• Arrendamiento operativo: Arrendamientos puros sin opción de compra.

La Importancia del contrato de arrendamiento

Un aspecto crucial en nuestra función como arrendadores es la creación y firma de un contrato de arrendamiento. Dicho documento regula la relación entre las partes, establece obligaciones y derechos, y protege tanto al arrendador como al arrendatario frente a posibles disputas.

Este contrato debe ser claro, detallando la descripción del bien, el importe de la renta, la duración del arrendamiento y las condiciones para la renovación o terminación del mismo.

Responsabilidades fiscales del arrendador

Al recibir un ingreso por el alquiler de nuestros bienes, estamos sujetos a obligaciones fiscales.

Debemos declarar estos ingresos en nuestra declaración de la renta y estamos sujetos al pago del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) o, en el caso de arrendadores que sean empresas, al Impuesto sobre Sociedades (IS).

Además, es importante estar al corriente con el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) y, en caso de aplicar, con el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA), especialmente en arrendamientos para uso distinto al de vivienda.

Ejemplos prácticos de arrendamiento

Ejemplo 1

Imaginemos que disponemos de un local comercial en el centro de la ciudad. Como arrendadores, firmamos un contrato de arrendamiento con una empresa emergente, que busca ubicación para su tienda. Acordamos una renta mensual y establecemos las condiciones de uso y conservación del local.

Ejemplo 2

Supongamos que somos dueños de un apartamento vacacional en la costa. Decidimos rentarlo durante el verano y, para ello, establecemos un contrato por tres meses con una familia, especificando el importe y la obligación de mantener el inmueble en buenas condiciones.