¿Qué es ilícito?

El término ilícito proviene del latín “illicitus” y se refiere a cualquier acto o comportamiento que no está permitido por la ley o que infringe las normativas vigentes.

Un acto ilícito puede tener consecuencias severas, como sanciones económicas, penas de cárcel, pérdida de confianza por parte de inversores o clientes y un serio daño a la reputación de la empresa involucrada.

De esta forma, entender qué constituye un ilícito y cómo evitarlo es esencial para la sostenibilidad y el correcto funcionamiento de cualquier negocio.

Tipología de los ilícitos

Los ilícitos pueden clasificarse según la naturaleza de la actividad y las leyes que se infringen.

A continuación, describimos algunas de las categorías más comunes:

• Ilícitos fiscales: Son todas aquellas acciones que buscan evadir el cumplimiento de las obligaciones tributarias. Esto incluye desde la omisión de ingresos hasta la falsificación de documentos fiscales.
• Ilícitos empresariales: Se refieren a prácticas comerciales ilegales o no éticas, como el uso de información privilegiada o el incumplimiento de las normativas de competencia.
• Ilícitos contables: Son las manipulaciones indebidas de la información financiera de una empresa con el objetivo, por ejemplo, de ocultar deudas o inflar beneficios.

Prevención de ilícitos

Para prevenir los ilícitos en el ámbito empresarial, hay que contar con un sistema de control interno sólido, una cultura organizacional basada en la ética y el cumplimiento de la normativa, así como la capacitación y sensibilización continua de los empleados.

• Auditorías: Realizar auditorías regulares es fundamental para detectar y prevenir prácticas ilícitas en una empresa.
• Políticas de cumplimiento: Establecer políticas claras de cumplimiento normativo ayuda a los empleados a entender las consecuencias de los actos ilícitos y cómo evitarlos.
• Formación: Brindar formación específica sobre la legislación aplicable a la actividad empresarial permite que los trabajadores estén más informados y puedan actuar de forma legal y ética.

Ejemplos prácticos para entender un hecho ilícito

Ejemplo 1: Imaginemos una empresa que decide no declarar todos sus ingresos a la Agencia Tributaria para pagar menos impuestos, esto constituye un ilícito fiscal y puede dar lugar a sanciones y multas severas.

Ejemplo 2: Supongamos que un contador de una empresa manipula los registros contables para mostrar una situación financiera más favorable de lo que realmente es, esto sería un ilícito contable que podría acarrear responsabilidades legales para la persona y la entidad.