¿Qué es pasivo exigible?

Entendemos por pasivo exigible el conjunto de todas las deudas y obligaciones que una empresa tiene que pagar a terceros.

Es decir, son los recursos que se deben devolver a proveedores, acreedores, instituciones financieras o cualquier otro tipo de entidad o persona que haya prestado recursos financieros a la empresa.

La característica principal de estos pasivos es su naturaleza exigible, lo que significa que existe un reclamo legal para su devolución.

Características del pasivo exigible

Las siguientes son características que definen al pasivo exigible:

• Temporalidad: Pueden ser de corto plazo (menos de un año) o de largo plazo (más de un año).
• Legalidad: Su devolución está amparada por contratos o acuerdos legales que especifican las condiciones de pago.
• Liquidez: Deben ser atendidos según la capacidad de liquidez de la empresa, pudiendo afectar su estabilidad financiera.

Tipos de pasivo exigible

Dentro del pasivo exigible, encontramos varios tipos que es crucial diferenciar:

• Pasivos financieros: Deudas con bancos o emisión de bonos.
• Cuentas por pagar: Deudas con proveedores por la adquisición de bienes o servicios.
• Préstamos por pagar: Importes solicitados a entidades financieras.
• Obligaciones con el personal: Sueldos, indemnizaciones y otras retribuciones pendientes de pago.
• Impuestos a pagar: Deudas impositivas con la administración pública.

En nuestro análisis contable, el pasivo exigible juega un papel fundamental, ya que nos permite entender las obligaciones financieras de la empresa y su capacidad para enfrentarlas.

Una cifra elevada de pasivo exigible puede indicar riesgos financieros, mientras que una gestión adecuada de estos pasivos denota una buena salud financiera y fiabilidad operativa.

Ejemplos prácticos de pasivo exigible

Imaginemos una empresa que tiene un préstamo bancario de 50.000 euros a cinco años. Dicha cantidad es un pasivo exigible, ya que representa una deuda a largo plazo que la empresa deberá saldar en el plazo acordado.

SUPONGAMOS que nuestro negocio ha comprado materia prima a un proveedor y aplazó el pago a 90 días. La cantidad adeudada se convierte en un pasivo exigible de corto plazo, que se deberá abonar en dicho periodo.