¿Qué es evento asegurado?

Un evento asegurado consiste en contratar un seguro que cubra los posibles inconvenientes que puedan surgir por una incertidumbre en su realización.

Supongamos un profesional que va a realizar un evento concreto con una duración temporal, pues bien, el organizador o la sociedad, deberá contratar un seguro de responsabilidad civil que cubra dicho evento.

A la hora de su contratación habrá que tener en cuenta los siguientes aspectos:

• El número de personas que acudirán.
• El lugar de realización.
• El día que se celebrará.
• El número de trabajadores contratados para el evento.
• Las funciones que desarrollará el organizador.

De manera que obtengamos un evento asegurado que garantice los daños corporales y materiales que pueden ocasionarse durante la preparación, la celebración y el desmontaje de dicho evento.

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¿Quién es el asegurado?

El asegurado será quien ejerza como titular de la póliza o contrato, de manera que consiga asegurar los posibles daños que puedan surgir contra sus bienes o su integridad, mediante el pago de una cuota de dinero, llamada prima de seguro.

En ocasiones la persona que contrata el seguro puede ser diferente al asegurado, como, por ejemplo, cuando una hija hace el seguro de su vehículo a nombre de su padre, pero ella consta como la conductora habitual, donde el padre será el tomador y ella la asegurada.

La persona que esté asegurada será quien corra con el compromiso del pago de la prima de seguro, la cual, recibirá un cálculo de riesgo previo a la contratación del seguro.

¿Qué tipos de seguros hay para un evento?

• Seguro de responsabilidad pública: protegerá al organizador en el caso de que algún asistente se lesione.
• Seguro de responsabilidad civil del empleador: este seguro cubrirá a los trabajadores mientras dure el evento en caso de que se lesionaran.
• Seguro de equipo: cubrirá el equipo que esté instalado en el evento en caso de que se dañe.
• Seguro de cancelación y abandono: cubrirá en caso de la no celebración del evento organizado.
• Seguro de daños a terceros: cubriría el lugar donde se está celebrando el evento.
• Seguro de eventos múltiples: si te dedicas habitualmente a la organización de eventos, este seguro te saldrá más barato, que contratar uno específico para cada evento que realices.