¿Qué es Devengo del IVA?

El devengo del IVA (Impuesto sobre el Valor Añadido) se refiere al momento específico en el que nace la obligación de pagar este impuesto.

En España, el IVA es un impuesto indirecto que grava el consumo y se aplica en la mayoría de las transacciones comerciales de bienes y servicios.

El devengo se produce cuando se realiza la entrega de bienes o la prestación de servicios, incluso si el pago no se ha efectuado aún.

Criterios de devengo para el IVA

La Ley del IVA establece claramente cuándo se considera devengado este impuesto.

Los criterios se basan en la naturaleza de la operación y pueden ser los siguientes:

• Entrega de bienes o prestación de servicios: El IVA se devenga en el momento en que se entrega un bien o se presta un servicio.
• Adelanto de pagos: Si se recibe un pago antes de la entrega o prestación, el IVA se devenga en el momento en que se cobra el adelanto, pero solo por el importe recibido.
• Facturas emitidas o recibidas: En el caso de emisión de facturas, hay que tener en cuenta si estas se emiten antes o después del devengo del IVA.

Nuestro sistema tributario también contempla reglas especiales de devengo para ciertos servicios y operaciones continuadas en el tiempo, así como para importaciones y exportaciones.

El devengo en servicios y operaciones continuas

Hay situaciones en las que los servicios se prolongan en el tiempo, como los alquileres o prestaciones de servicios continuados. En tales casos, el devengo del IVA ocurre de manera diferente.

Por lo general, se establece que el IVA se devenga a medida que se van emitiendo las facturas correspondientes al servicio, o bien en los plazos que se pacten contractualmente, pero siempre dentro de los márgenes que contempla la ley.

El momento de devengo

Conocer el momento exacto del devengo del IVA es crucial para la gestión empresarial y contable. Dicho conocimiento permite:

• Determinar el periodo impositivo al que corresponde el IVA devengado.
• Hacer una correcta declaración y liquidación de los impuestos.
• Mantener un flujo de caja ajustado a las realidades fiscales de la empresa.

La incorrecta interpretación o aplicación del momento de devengo puede llevar a errores en la declaración del IVA, lo cual puede resultar en sanciones y recargos por parte de la Agencia Tributaria.

Ejemplos prácticos de devengo del IVA

Ejemplo 1: Prestación de servicios

Imaginemos que nuestra empresa presta un servicio de consultoría que se entregó el 30 de septiembre, pero la factura correspondiente se emite y se paga el 15 de octubre. El devengo del IVA ocurre el 30 de septiembre, que es cuando se realizó efectivamente la prestación del servicio.

Ejemplo 2: Venta de bienes con adelanto

Supongamos ahora que nuestra empresa vende un lote de mercancías cuyo pago se acuerda en dos partes: un adelanto el 1 de julio y el resto a la entrega de los bienes el 30 de agosto. El devengo del IVA por el importe del adelanto se produce el 1 de julio, mientras que por el resto del pago se devenga el 30 de agosto con la entrega de la mercancía.