glosario contable>Documentos comerciales

¿Qué es documentos comerciales?

Los documentos comerciales son registros escritos que constituyen prueba de las operaciones de comercio que realiza una empresa o un emprendedor, y que tienen validez legal y contable.

Engloban desde contratos hasta recibos, facturas y albaranes, entre otros. Son necesarios para presentarlos ante la administración tributaria, para justificar movimientos de fondos y en la gestión de relaciones con clientes, proveedores y otros actores económicos.

Características de los documentos comerciales

Para que estos documentos sean considerados válidos deben cumplir con una serie de características:

  • Legalidad: Deben ajustarse a las normativas vigentes del país en el que se operen.
  • Autenticidad: Tienen que ser verdaderos, y su contenido reflejar con exactitud las operaciones realizadas.
  • Integridad: No pueden estar mutilados ni presentar enmiendas que los hagan sospechosos de alteración.
  • Legibilidad: Su contenido debe ser claro y comprensible para todas las partes que los manejan.

Tipos de documentos comerciales

Existen diversos documentos comerciales que se utilizan en el día a día de una empresa.

Algunos de los más comunes incluyen:

  • Facturas.
  • Recibos.
  • Albaranes o notas de entrega.
  • Presupuestos.
  • Pedidos.
  • Contratos.
  • Letras de cambio.
  • Cheques.
  • Pagarés.
  • Notas de crédito.
  • Notas de débito.

Funciones de los documentos comerciales

Los documentos comerciales no solo demuestran la existencia de una transacción comercial, sino que también:

  • Acreditan derechos y obligaciones de las partes involucradas.
  • Facilitan el rastreo y la comprobación de las operaciones.
  • Sirven como herramientas de gestión y control interno en una empresa.
  • Son imprescindibles para la realización de auditorías.
  • Asisten en el correcto cumplimiento de las obligaciones fiscales.
  • Contribuyen a la resolución de posibles controversias o reclamaciones.

Reglas para la elaboración de documentos comerciales

Para que estos documentos sean eficaces y cumplan sus funciones de manera correcta, debemos seguir una serie de reglas durante su elaboración:

  1. Incluir todos los datos relevantes tales como nombres, identificadores fiscales, descripción de los productos o servicios, cantidades, precios, fechas, y firmas cuando es necesario.
  2. Respetar el formato estipulado por ley para ciertos documentos, por ejemplo, en el caso de las facturas.
  3. Mantener un archivo organizado y sistemático que permita un rápido acceso a la información contenida en ellos.
  4. Asegurarse de la correcta número de la serie en caso de documentos secuenciales como las facturas o los recibos.

Ejemplos prácticos de documentos comerciales

Ejemplo 1: La firma de un contrato

Imaginemos que una empresa de eventos necesita contratar los servicios de un catering para una conferencia importante. Ambas partes acuerdan los términos y condiciones, y elaboran un contrato que detalla el tipo de servicio, el costo, la fecha y el lugar del evento. Este contrato sirve como documento comercial que protege a ambas partes y evidencia la transacción realizada.

Ejemplo 2: Emisión de una factura

Consideremos ahora a un autónomo que presta servicios de consultoría. Tras finalizar su trabajo, emite una factura detallando los servicios prestados, el importe a pagar, el IVA correspondiente y otros datos fiscales. Esta factura es un documento comercial esencial, ya que será usado para el pago, para declarar ingresos y para deducir impuestos tanto por el consultor como por la empresa que lo contrató.

No te pierdas nada

Subscríbete a la Newsletter de Billin

A principios de cada mes enviamos un email
con todas las novedades.