¿Qué es formación continua?

La formación continua es el proceso de aprendizaje permanente que persigue la actualización y mejora de las competencias y habilidades de los profesionales a lo largo de su vida laboral.

Esto incluye una amplia gama de actividades educativas, como cursos, seminarios, talleres o incluso estudios de posgrado, dirigidos tanto a empleados como a empresarios y profesionales autónomos.

Su finalidad es adecuar los conocimientos y las destrezas de los trabajadores a las innovaciones y cambios que se producen en el mercado y en las regulaciones de su sector.

Modalidades de formación continua

Existen distintas modalidades de formación continua que se adaptan a las necesidades y circunstancias de cada profesional.

Algunas de estas modalidades son la formación presencial, donde el aprendizaje se lleva a cabo en un aula o espacio físico; la formación en línea o e-learning, que permite estudiar desde cualquier lugar con acceso a internet; y la formación mixta o blended learning, que combina elementos de ambos métodos anteriores.

Cada una de estas modalidades tiene sus ventajas y se ajusta a distintos estilos de aprendizaje.

Beneficios de la formación continua

La formación continua ofrece una serie de beneficios tanto para las empresas como para los trabajadores.

Para las organizaciones, mejora la eficiencia y la productividad, facilita la retención de talento y mejora la imagen de la empresa.

Para los empleados, amplía las oportunidades laborales, aumenta la satisfacción en el trabajo y mejora la adaptabilidad a los cambios.

Estrategias para implementar la formación continua

Para implementar un plan de formación continua efectivo, consideramos necesario llevar a cabo un análisis de las necesidades formativas de la empresa y de los profesionales que la integran.

Posteriormente, se seleccionan los programas y los proveedores de formación más adecuados. Por último, se establece un seguimiento y evaluación del aprendizaje para asegurar que los objetivos se están cumpliendo.

Ejemplos prácticos de formación continua

Imaginemos un despacho de asesores fiscales que decide implementar un programa de formación continua para su equipo. Podrían organizar seminarios mensuales sobre las novedades en la legislación fiscal.

De esta manera, el equipo se mantiene al tanto de los cambios legales y puede ofrecer un mejor servicio a sus clientes.

Otro ejemplo podría ser una empresa de software contable que ofrece formación en línea a sus usuarios. Con videos tutoriales y webinars se actualiza a los usuarios sobre cómo utilizar las nuevas funcionalidades que se van incorporando al software.