¿Qué es homologado?
Homologación en el entorno empresarial
En el área fiscal y empresarial, un producto o servicio homologado puede referirse a sistemas de gestión de calidad como ISO, que avalan que una empresa opera bajo estándares internacionales.
También puede tratarse de homologación en términos de cumplimiento normativo, como la adaptación a normativas de protección de datos, laborales o de seguridad e higiene. Esta homologación es fundamental para que las empresas puedan actuar conforme a derecho, evitando sanciones y reforzando su reputación en el mercado.
Ejemplos de homologación
Una empresa fabricante de juguetes decide exportar sus productos a Europa. Para ello, debe asegurarse de que cumplen con la normativa de seguridad de la Unión Europea, representada por el marcado CE. Al obtener la homologación, los juguetes pueden comercializarse en cualquier país de la UE, demostrando que son seguros para su uso por niños.
Una compañía multinacional quiere listar sus acciones en diferentes bolsas de valores internacionales. Para que sus estados financieros sean comprendidos y aceptados en distintos países, deben estar preparados bajo una base homologada de presentación, como las ya mencionadas NIIF. Al hacerlo, los inversores pueden tener la confianza de que la información es comparable con la de otras empresas a nivel global.
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